OJOS HECHICEROS
Ojos hechiceros, cristales de tu alma,
embrujo de mi corazón.
Tormento de mi existencia al mirarlos,
combinación impredecible con el entorno de tus labios.
Y el deseo incontenible de besarlos.
Impaciencia intolerable de catarlos
como al más dulce de los vinos,
mostrando un escalofrío estimulante e inquebrantable al yo rozarlos.
Tenaz suspicacia de alcanzarlos
y tierna e incondicionalmente conquistarlos.
Tembloroso de ansiedad buscarlos
hasta hallarlos en lo más sublime de un inquietante sortilegio.
Luis Jiménez Dubernard.
Tepoztlán, mor, 1990.
No hay comentarios:
Publicar un comentario